Las vicisitudes de nuestros amores en diversas vidas pasadas.
Recordar… debo recordar… recuperar todo lo que platicamos Danny y yo esta madrugada.
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Después de resolver nuestro dilema y amarnos, empezamos a platicar como antes, o casi como antes y llegamos al tema de lo que sufrimos en esta encarnación como Daniel y Silvia y cómo nos afectó la distancia; nos pusimos nostálgicos.
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-Pagamos muy caro el amarnos en Teotihuacan, bebé, pero no pude resistirme a tu belleza y tuve que conquistar tu amor, con un costo muy alto, entonces y ahora.
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-Sí amor, lo sé. En esta vida ni siquiera tuvimos la oportunidad de tocarnos, acariciarnos, mucho menos la posibilidad de tener un hijo tuyo, de llevarte a ti, a la esencia de tu vida, junto con la mía, en mi vientre, qué emoción tan inefable, qué ilusión más grande.
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¿Sabes si alguna vez tuvimos hijos?
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-Sí, mi amor, cuando fuimos ostrogodos, tuvimos un…
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