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CHINA ORIGEN DE LA SEDA.
Remota y mágica. Tierra de secretos suspirados. Gigante de mil rostros, Provocadora y estoica. Sus montañas, estepas, caudalosos ríos, desiertos y bosques y sus misterios, soberana en tiempos remotos y despertando de su sueño milenario.
Esa cultura milenaria, poseedora de una extraordinaria historia y sabiduría; inagotable e inabordable por vasta y heterogénea.
INVENTOS DE CHINA ANTIGUA
China cuenta con la cultura continua más longeva del mundo y desde la remota antigüedad materializó inventos variados y extraordinarios.
Como por ejemplo:
- La imprenta con caracteres móviles tallados y cocidos en arcilla
- La pólvora varios siglos antes que cualquier otra civilización
- La brújula
- El papel
- La porcelana
- La carretilla
- La ballesta usada hasta el perfeccionamiento del fusil
- Paraguas
Inventados en China hace tres mil años y traídos a Europa gracias a la ruta de la seda, el uso de los paraguas en el siglo XVII era considerado de poca distinción pues, además de las mujeres, los paraguas eran utilizados por aquellos que no tenían carruajes, los pobres. Jonas Hanway fue el primer londinense que se animó a utilizarlo a pesar de las burlas y logró convertirlo con el tiempo en un verdadero objeto popular.
-
La seda.
Esos grandes inventos los guardaron con secreto por siglos y una vez descubiertos, trajeron a Occidente cambios en los más diversos ámbitos, tanto positivos como negativos.
CÓMO SE DESCUBRIÓ LA SEDA
Según la historia convencional de la tradición china, la seda se descubrió en el año 2640 a. C. (pero hay hallazgos arqueológicos de que pudo haber sido usada desde hace más de 7000 años)
De acuerdo con una leyenda, Huang Ti, el Emperador Amarillo pidió a su esposa Xi Ling Shi que averiguara qué estaba acabando con sus plantas de morera.
La mujer descubrió que eran unos gusanos blancos que producían capullos brillantes. Al dejar caer accidentalmente un capullo en agua tibia, Xi Ling Shi advirtió que podía descomponerlo en un finísimo filamento y enrollar éste en un carrete. Había descubierto cómo hacer la seda.
LA RUTA DE LA SEDA
La historia de la fantástica ruta de la seda bordeando las espléndidas dunas del Desierto, escalando impresionantes montañas, soportando tormentas de arena, nieve y climas extremos es sólo un ejemplo de los impresionantes logros de la China ancestral.
QUIEN NOMBRÓ LA RUTA DE LA SEDA
en 1877 el geógrafo alemán Ferdinand von Richthofen acuñó el término “ Ruta de la Seda” o Seidenstrasse (en alemán) y lo introdujo en el primer tomo de su libro China y en su conferencia titulada Las Rutas de la Seda en Asia Central.
El término fue recibido de buen agrado hasta en China.
IMPORTANCIA DE LA RUTA DE LA SEDA
La Ruta de la seda fue una vía de conexión de las culturas oriental y occidental durante siglos, una red de rutas comerciales entre Asia y Europa y de ahí a América y viceversa. La Ruta de la Seda fue mucho más que eso, fue en realidad uno de los logros más significativos de la historia de la civilización del mundo.
Así como propició un intenso intercambio comercial, también fue un puente ideológico que permitió asimilar y vincular ideas, filosofías y hasta religiones entre oriente y occidente.
EL ITINERARIO DE LA RUTA DE LA SEDA
La ruta de la seda clásica contaba con diferentes caminos que partiendo de Chang’an (actualmente Xi’an) en China, atravesaban el corredor de Gansu hasta Kashgar, ciudad oasis, hoy Kashi.
De ahí se bifurcaba en 2 rutas alternas : la del norte y la del sur convergiendo ambas en Kaschgar,
Entre Kashgar y Kokand se encontraban las montañas de Pamir, lugar estratégico de la Ruta de la Seda del norte, que conectaba Xian, la antigua capital de China, con el occidente, a través de las montañas de Pamir, pasando por Kashgar antes de llegar a la antigua Partia, al sureste del Mar Caspio (ahora Irán).
De ahí a Samarcanda y Bukhara, Merw, Mashad (o Mesched) para continuar atravesando Asia Central, Persia (ahora Irak e Irán) dividiéndose después para llegar a la Cuenca Mediterránea, en el norte a Constantinopla, en Bizancio (actualmente Estambul, Turquía) llamada la Encrucijada del Mundo y Antioquía en Siria (ahora está en Turquía); hacia el sur llegaban hasta Alejandría, en Egipto.
Del Mediterráneo oriental partían embarcaciones de mercaderes para llevarlas a Roma, de donde se distribuían las mercaderías a todo el Imperio o hasta los reinos hispánicos y desde Alejandría, por tierra y mar a lugares de África, Arabia, India y el sureste asiático, sitios a los que también llegaban por mar desde China.
No era un único camino o ruta sino que las caravanas a todo lo largo de los polvorientos y difíciles caminos y pasaban de mano en mano las mercancías como en una carrera de relevos en la que cada intermediario subía el precio hasta alcanzar precios exorbitantes.
BIENES QUE TRANSITABAN POR LA RUTA DE LA SEDA
En la Ruta de la Seda circulaba no sólo la tan preciada tela sino las más diversas mercancías, todas ellas muy valoradas como:
- Piedras y metales preciosos,
- Jade
- Telas de lana o de lino
- Ámbar
- Perfumes
- Tintes
- Marfil
- Perlas
- Laca
- Especias
- Vidrio
- Incienso
- Esclavos
- Oro
- Granos
- Aceite de oliva
- Vino
- Coral
- Monedas
- Plata y estaño
- Animales exóticos de África del Este
- Madera
EL ORIGEN DE ESTA RUTA
La Ruta de la Seda, como un espacio de intercambios, estuvo activa desde el Paleolítico. También es heredera de la ruta de Jade, cuyos restos se remontan desde hace 7000 años, ya en tiempos históricos se dice que durante la Dinastía Han en 138 a C, el emperador decidió establecer alianzas con los reinos del oeste y del noroeste, contra enemigos de las tribus Xiang-Nu (hunos), cuyas invasiones eran cada vez más frecuentes y violentas.
Los hunos tenían una superioridad militar debida a su caballería fuerte, veloz, esbelta y ligera, más apta para la guerra que la caballería china, cuyos caballos eran inadecuados para toda actividad que exigiera rapidez de movimientos.
Una y otra vez este poderoso pueblo de la estepas penetraba en China y sólo era aplacado con regalos de seda, joyas y princesas núbiles.
La Gran Muralla China cuya construcción había iniciado el Emperador Qin (año 221 a C) no lograba contenerlos por eso buscaban alianzas militares y políticas con reinos lejanos en las fronteras occidentales.
Aún cuando éstas no se concretaron, los chinos encontraron que estos reinos occidentales lejanos eran verdaderas potencias comerciales, por lo que la dinastía Han estableció contactos comerciales con estos reinos de Asia Central.
Tras varias ofensivas contra los hunos, China conquistó todas las tierras entre sus fronteras y los Reinos del Valle de Ferghana. Así, los chinos consiguieron la importación de los famosos caballos de las estepas, y colocaron sus propios productos en los mercados de estos reinos, abriéndose una ruta comercial de más de cuatro mil millas que permitió el tránsito de bienes e ideas entre Europa y Asia.
Se dice que el emperador Wu Di envió una delegación al rey de Parthia (en la región que hoy es Irán), en el 115 a. C. y así se inició la Ruta de la Seda.
LA SEDA LLEGA AL IMPERIO ROMANO
Cincuenta años más tarde, cuando Marco Licinio Craso, gobernador romano de la Provincia de Siria, llegó a Parthia se asombró al ver un brillante, suave y maravilloso nuevo tejido.
Unas décadas más tarde, las más acaudaladas familias de Roma podían vestirse y lucirse con el más preciado tejido: la seda.
Los romanos se convirtieron pronto en grandes entusiastas de la seda, tras conocerla a través de los partos, quienes controlaban su comercio. se hicieron adictos a la seda china y la compraban a comerciantes que la transportaban más de 6500 kilómetros a través de Asia Central, por la peligrosa Ruta de la Seda, hasta el Mediterráneo oriental en una travesía que duraba ocho meses.
LOS PELIGROS DE LA RUTA DE LA SEDA
Era una ruta peligrosa y rara vez atravesada en su totalidad. Normalmente, era atravesada en caravanas bien equipadas para ponerse a salvo de los mil peligros con que era acechada. Habían diferentes sub-rutas dependiendo de las condiciones locales. Los mercaderes recorrían parcialmente este eje o corredor Roma – Chang-an, rodeando el desierto de Gobi, atravesando Asia Central, India, Medio Oriente y el Mediterráneo. articulando los distintos eslabones, se recorría esta gran cadena territorial.
Recorrerla era muy difícil por las condiciones climáticas: nieve, hielo, glaciares, cruce de cordilleras y ríos, desiertos, etc.; además era tanta la riqueza de todo lo que por ahí transitaba que se llenó de ladrones, asesinos y forajidos que estaban dispuestos a apropiarse de las fabulosas mercancías y muchas veces los conflictos bélicos de la región afectaban el paso de las mercancías.
En muchas ocasiones los comerciantes morían víctimas de atracos, accidentes o enfermedades. En cada localidad que paraban para descansar debían proveerse de comida para un mes. Los camellos fueron invaluables para estas caravanas, tanto los camellos bactrianos de dos jorobas en el desierto de Gobi, como los dromedarios de una joroba en Medio Oriente y África.
CENTROS IMPORTANTES DE INTERCAMBIO
Algunas ciudades de la ruta se convirtieron. por su situación geográfica. en puntos de encuentro de ideas y religiones. Así por ejemplo la ciudad de Kashgar (hoy Kashi) era el primer punto de encuentro entre occidente, Asia del sur y China; ahora es uno de los centros musulmanes de mayor importancia en la República Popular China.
Los monjes budistas también recorrieron esta ruta hacia el siglo V encontrando en ella una vía de propagación muy extensa transitando desde India hasta el Tíbet y del Tíbet a Dunhuang, en la provincia de Gansu, China, ciudad oasis con auge cultural. Hacia el 629 aquí se encontraban budistas, maniqueos, cristianos, judíos y musulmanes.
LOS MUSULMANES EN LA RUTA DE LA SEDA
Quedaba pues de manifiesto la multiplicidad de doctrinas y sabiduría que confluían en estos caminos. Más tarde con el apogeo del Islam (Siglo VII y VIII), el mundo musulmán controló la mitad occidental de la Ruta de la Seda .
Para ellos esta ruta supuso una excelente fuente de ingresos ya que los comerciantes islámicos ejercían el papel de intermediarios.
Entendieron la importancia de la derrama económica y por ello evitaron la entrada de comerciantes europeos y asiáticos.
Ellos cruzaban para adquirir a bajo costo y vender a precios estratosféricos.
LOS MONGOLES Y LA RUTA DE LA SEDA
Desde Asia Central, Kublai Khan sometió grandes territorios del sur de China creando el mayor imperio continental que existió nunca: el Imperio mongol, con sus centros políticos encadenados a lo largo de la Ruta de la Seda:
- Pekín, en el norte de China
- Karakorum, en el centro de Mongolia
- Samarcanda, en Transoxiana (ahora Uzbekistán)
Samarcanda es una de las ciudades más antiguas del mundo aún habitadas. Dada su ubicación, Samarcanda prosperó debido a estar localizada en la Ruta de la Seda entre China y Europa. Llegó a ser una de las ciudades más grandes de Asia Central.
Ver:
https://serunserdeluz.wordpress.com/2014/06/22/la-ruta-de-la-seda-uzbekistan-samarkanda-en-imagenes/
https://2012profeciasmayasfindelmundo.wordpress.com/2014/04/28/samarcanda/
- Tabriz, en el norte de Irán
- Sarai
- Astracán, en el curso del Bajo Volga;
- Solkhat, en Crimea
- Kazán, en Rusia central
- Erzurum, en el este de Anatolia
Realizando la unificación política de zonas anteriormente libres y conectadas de forma intermitente por bienes materiales y culturales y bajo la pax mongólica dicha ruta tuvo una época de estabilidad en la que se gozaba de rapidez y gran seguridad (siglos XIII y XIV).
Se habían establecido en la ruta una densa red de paraderos con provisiones y caballos para poder continuar el camino, como lo atestigua Marco Polo en sus relatos.
LA RUTA DE LA SEDA ES CERRADA
Es en el siglo XV cuando la Dinastía Ming se retiró de todo contacto con extranjeros cerrando dicha ruta.
Algunos datos tomados de:
http://es.wikipedia.org/wiki/Samarcanda
Fuente: Rita Martínez
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Imágenes tomadas de internet, Pinterest o de los enlaces relacionados. Creo que no es necesario advertir que algunas fotos, como el caballo de jade, la seda y otros, son imágenes actuales, sólo para dar una idea de cómo fueron en aquellos tiempos.
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Suspiré admirado por el hilo del relato produciendo seda y, devorando sueños milenarios. Provocadora lectura de esa cultura milenaria. Imposible parar de leer. Transmitir el pensamiento escrito sobre papel, creando fuegos artificiales dirigidos con brújula, transportados en carretillas, flechado con la ballesta de cupido; tapándome con un paraguas para no mojar mi seda dejando resbalar las gotas de lluvia. Vuestra narrativa me transportó a esos lugares y con toda esa gente, siguiendo ambas rutas para transportar la seda, convergiendo en Kaschgar, iluminado por el caballo de jade chino marcando inconfundible ruta. Gracias por deleitar mi mente. Un abrazo con norte, desde el sur.
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Bueno, qué puedo responder, sólo que escribes muy bonito, gracias por este hermoso comentario ¿de dónde eres? a donde quiera que estés, te mando un abrazo.
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Gracias, vuestra luz sigue iluminando mi camino. «No soy de aquí, ni soy de allá, no tengo edad ni porvenir y ser feliz es mi color de identidad…» ¡ Cómo me gusta oír cantar a Facundo Cabral ! Un abrazo, desde donde quieras que quieras que yo esté. Me gusta tu blog.
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Pues gracias a donde quiera que estés.
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Hola Silvia,
documentadísimo artículo que he disfrutado doblemente por las fotos que nos presentas. Como bien dices la importancia de esta Ruta marcó la Historia durante siglos. Pueblos y ciudades crecieron a su alrededor y los productos que se dieron a conocer en Occidente cautivaron y dieron pie a leyendas que permanecieron en la mente de los europeos.
Un abrazo
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Hola Javier, gracias por tu comentario y gracias por mencionar las fotos, me lleva mucho tiempo encontrarlas y casi nadie me dice si las aprecia, me alegra que a ti te hayan gustado. Efectivamente la Ruta de la Seda tuvo una gran influencia en la civilización tanto oriental como occidental. Tú como historiador lo sabes mejor que yo.
Un abrazo
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No Silvia, no soy historiador solo alguien a quien le gusta mucho la Historia. ¡Ja, ja, ja!
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Hola Javier. Pues ya sé que eres médico, pero por todo lo que escribes (y por cómo lo escribes) yo hubiera jurado que también eres historiador. 🙂
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Ciertamente, hay que tomarse tiempo extra, pero es esperanzador, aleccionador y sugerentemente captador de ilusiones, este relato y todos los tuyos, Silvia. China esa gran desconocida.
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Hola Enrique, gracias por tu bonito comentario. China ancestral siempre me ha llamado la atención, una gran cultura con muchos misterios. Saludos
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